Resumen
La educación lasallista, como una propuesta de formación integral inspirada en los valores del Evangelio, se enfrenta hoy a retos sin precedentes. Educar para la vida en los tiempos que corren implica mucho más que la recuperación de una rica tradición pedagógica y eclesial; antes bien, exige una profunda reflexión acerca de las necesidades apremiantes de los diversos contextos locales y globales, que reclaman ser tenidas en cuenta. Asuntos como nuestro papel en y con respecto al mundo, los derechos humanos, los procesos de inclusión y la formación crítica, entre otros, deberán formar parte de agenda educativa lasallista para los próximos años, como se esboza en el presente texto.