Resumen
El acceso de las mujeres a la educación superior en Venezuela y Colombia ocurrió hacia la tercera década del siglo XX. Su ingreso tuvo lugar en aquellas profesiones socialmente percibidas como apropiadas a la naturaleza del trabajo femenino, por su menor demanda de esfuerzos físicos y carácter sedentario, además de las que se consideraban inherentes a su naturaleza “maternal”. La entrada a la universidad en Colombia fue facilitada por los cambios sociopolíticos y económicos que se articulaban al crecimiento industrial en Venezuela, por las transformaciones vinculadas al impacto petrolero y al crecimiento de la administración pública, elementos que más adelante condujeron a la profesionalización del trabajo femenino. Este artículo reconstruye el proceso de ingreso de las mujeres a la educación superior agrícola en ambos países, con metodología histórico-comparativa que caracteriza el entorno socioeconómico y cultural afrontado para remontar las dificultades del ingreso a un campo vetado socialmente por su masculinización.